La nueva miniserie de Star+ narra el crimen cometido contra Pamela Anderson y Tommy Lee en los 90.
La nueva serie exclusiva de Star+, Pam & Tommy, cuenta la historia detrás del infame infame sex tape de la pareja Pamela Anderson y Tommy Lee filtrado en los años 90. Protagonizada por Lily James y Sebastian Stan, la historia recrea desde el robo de la cinta hasta la batalla posterior, planteando temas como el revenge porn y la violación de la privacidad en la era de Internet.
Aunque Anderson y Lee no están involucrados en la serie, el showrunner Rob Siegel dijo a Entertainment Weekly que quería hacer algo que mostrara definitivamente el dolor que atravesó la pareja con el escándalo.
"Cuando comentaba que estaba haciendo una miniserie sobre el tema, la gente me decía que siempre había pensado que los dos habían filtrado la cinta a propósito. Estoy contento de poder aclarar las cosas, demostrando que ellos fueron verdaderas víctimas de todo esto", dijo.
Pam & Tommy | Tráiler Oficial Subtitulado | Star+
Conoce más del caso para entender mejor la serie Pam & Tommy
Lee y Anderson se conocieron en diciembre de 1994, pero empezaron a salir oficialmente cuando hicieron un viaje a Cancún, México, en febrero de 1995. 96 horas después del viaje, los dos decidieron casarse en una boda junto al mar.
Según información de testigos dada en ese momento a la revista People, los dos parecían quererse mucho e hicieron que el matrimonio fuera espontáneo y divertido.
Cuando la pareja empezaron a vivir juntos, contrató a un grupo de personas para reformar su mansión de Malibú, y así es como entra en la historia Rand Gauthier, el responsable de la filtración del vídeo sexual.
Durante las reformas de la casa, Gauthier trabajó para la pareja como electricista. Sin embargo, fue despedido cuando Anderson y Lee despidieron a un grupo de trabajadores del proyecto de renovación. Además de perder el trabajo, la pareja se negó a pagarlo, alegando que el trabajo estaba "mal hecho", según Rolling Stones.
Gauthier y un contratista general finalmente regresaron a la casa para recoger sus herramientas, cuando Lee supuestamente les apuntó con un rifle y les ordenó que salieran de su propiedad.
Molesto por toda la situación, Gauthier ideó un plan para vengarse de Lee robando su caja fuerte, que creía que contenía las armas del baterista y las joyas de Anderson.
Durante una entrevista con Rolling Stone, Gauthier dijo que "pasó todo el verano de 1995 preparándose para el atraco". Según él, el electricista manejó hasta su casa por la noche y los observó afuera en su automóvil.
Cinco días antes de Halloween, Gauthier decidió ejecutar su plan. Llegó a la casa a las 3 de la madrugada mientras Anderson y Lee dormían y se cubrió con una alfombra de piel de yak para intentar parecer un perro, y luego saltó la valla. Desactivó las cámaras de seguridad, que él mismo había instalado, y entró en la habitación de Lee y Anderson.
Después de conseguir la caja fuerte, fue al garaje, la puso en un carrito y salió de la casa. Gauthier le dijo a Rolling Stone que llevó la caja fuerte a un "lugar seguro" y cortó la parte posterior de la caja fuerte con una sierra. Además de encontrar fotografías familiares, joyas y el bikini blanco que Anderson llevó a su boda en la playa con Lee, Gauthier descubrió el vídeo sexual, una cinta Hi8 utilizada en una videocámara portátil.
Tras descubrir la cinta en la caja fuerte, Gauthier la llevó al estudio porno de North Hollywood donde trabajaba. Mostró la cinta al productor de películas para adultos Milton "Uncle Miltie" Ingley y ambos hicieron copias de la cinta para venderlas. También desecharon la cinta Hi8 original fundiendo el envoltorio y esparciendo trozos cerca del parque de atracciones Six Flags Magic Mountain.
Aunque se pusieron en contacto con varias empresas para distribuir la cinta, ninguna quiso trabajar con ellos, ya que Anderson y Lee no firmaron una autorización. Finalmente se reunieron con el mafioso Louis "Butchie" Peraino, que accedió a darles 50.000 dólares para cubrir la fabricación y la distribución por Internet de la cinta, "con la expectativa de que recibiría los intereses del préstamo y una parte de las ventas", según informa Rolling Stone.
Apenas dos meses después del robo de Gauthier, Anderson y Lee se dieron cuenta de que la caja fuerte había desaparecido. Ellos presentaron una denuncia policial y contrataron a un investigador privado llamado Anthony Pellicano, que acabó relacionando a Ingley con la cinta filtrada. Ingley dijo que obtuvo la cinta del diseñador de interiores Guerin Swing.
Tras la noticia de que la revista Penthouse había obtenido una copia de la cinta, Anderson y Lee decidieron emprender acciones legales. El 29 de marzo de 1996, presentaron una demanda civil de 10 millones de dólares contra todas las partes que creían estar en posesión de la cinta, incluyendo Penthouse, Ingley, Gauthier, Swing y otros.
Anderson y Lee solicitaron una orden de restricción temporal contra Penthouse, que fue denegada, y la revista finalmente publicó su número de junio con Anderson en la portada y los detalles del vídeo sexual en el interior. No tenían permiso de copyright para utilizar las imágenes de la cinta, así que utilizaron Polaroids robadas de la pareja de 1995.
La pareja demandó a la revista por invasión de la privacidad, pero un juez de Los Ángeles desestimó la demanda y afirmó que las imágenes no eran "privadas", ya que ya se habían publicado en revistas anteriores. El abogado de Penthouse también argumentó que desde que Anderson ha posado desnuda en varias ocasiones y porque ambos han hablado de su vida sexual en entrevistas, han perdido su derecho a la intimidad en cuanto al contenido del vídeo", según Rolling Stone.
El fundador de Internet Entertainment Group (IEG), Seth Warshavsky, obtuvo posteriormente una copia de la cinta y comenzó a transmitirla en línea. En un esfuerzo por acabar con la situación de una vez por todas, Anderson y Lee llegaron a un acuerdo. Bajo la impresión de que a Warshavsky solo se le permitiría transmitir la cinta en línea, y sin comprender completamente el alcance que tendría Internet, la pareja le otorgó los derechos de autor de la cinta.
Cuando siguieron publicando copias físicas de la cinta, demandaron a Warshavsky ante un tribunal federal. Sin embargo, cuando el caso llegó al tribunal federal, Warshavsky había huido del país a Bangkok. Un juez ordenó a su empresa pagar a Anderson y Lee 740.000 dólares a cada uno, pero nunca vieron ese dinero.
A pesar de ser el responsable del robo de la cinta, Gauthier nunca fue a la prisión. Sin embargo, enfrentó problemas legales y financieros cuando comenzaron a circular copias pirateadas de la cinta. Peraino, quien le había dado fondos a Gauthier para distribuir el video sexual, luego lo obligó a pagar sus deudas trabajando para la mafia.
Según Rolling Stone, Gauthier vive en las afueras de Santa Rosa, California, donde trabaja como electricista y “cultiva marihuana en su garaje”.
Anderson y Lee estuvieron casados desde febrero de 1995 hasta 1998 y tienen dos hijos juntos, Brandon y Dylan. Anderson y Lee volvieron a estar juntos en 2008, pero no duró mucho. Aunque tuvieron una relación tumultuosa, Anderson ha declarado desde entonces que Lee era el "amor de su vida".
"Estaba Tommy y luego no había nadie más. Era el amor de mi vida. Tuvimos un comienzo salvaje y loco que fue demasiado para los dos", dijo Anderson a la revista People en 2015. "Fue realmente amor". a primera vista. Lo conocí cuatro días antes de casarme con él. Mis hijos están agradecidos de haber nacido del amor verdadero”.
